Entrevista con Carolina Piñeros, directora de esta oenegé, a propósito del regreso de la presencialidad en las aulas.
Redacción Gestarsalud
Se trata de una buena noticia porque si bien la ciencia ha demostrado que el riesgo de esta población frente al covid-19 es menor que en los adultos, los menores sí que han visto afectada su cotidianidad y su normal desarrollo por cuenta de la virtualidad.
En entrevista con Gestarsalud, Carolina Piñeros Ospina, directora ejecutiva de Red Papaz, habló sobre los retos que implica la nueva presencialidad en los colegios, la responsabilidad del Estado en garantizar condiciones para todos -en especial los niños de la zona rural del país- y la necesidad de soluciones aterrizadas. “No solo basta con invertir en adecuaciones bioseguras”, aseguró Piñeros.
¿Por qué es importante que los niños regresen a las aulas de clase tras casi dos años de ausencia?
Desde Red Papaz creemos que nos hemos demorado en movernos como país para tomar decisiones frente a esta situación. Los niños y niñas fueron los primeros en confinarse y los últimos en regresar. Por eso creemos que los colegios no se pueden cerrar nuevamente en caso de que la situación se ponga más compleja porque ya hay mucha evidencia de lo que sí los afecta. Debemos garantizar este derecho.
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¿Qué medidas se pueden tomar para que no se vuelva a ver afectada la presencialidad escolar?
Al principio se pensó que había que hacer una cantidad de cosas y situaciones y creo que fue mucho más sencillo de lo que se dijo inicialmente. Los ministerios de Educación y Salud han aclarado la importancia de la ventilación y el uso permanente del tapabocas. Pero hay complejidad específicamente en colegios que no tienen saneamiento básico o nunca lo han tenido lamentablemente y esto es algo que la pandemia evidenció y que nos debería como país dar vergüenza tener colegios sin agua. Entonces yo creo que tenemos que priorizar a los niños y niñas y garantizar derechos, debemos empezar por ahí.
El Gobierno ha hecho millonarias inversiones en adecuaciones de salones y espacios, ¿esto realmente es necesario o debe haber otras soluciones?
Se necesita mucho más. Deberíamos priorizar, por ejemplo, el saneamiento básico, que todos los colegios tengan agua y que el país reporte cuántos colegios recibieron saneamiento. Es importantísimo dar apoyo psicosocial, pero hay inequidad especialmente en los colegios rurales. Aquí la inequidad tiene que ver con que hay secretarías de Educación que tienen más posibilidades que otras, entonces a los niños nunca se les van a suplir las necesidades. La invitación al Gobierno es atender las carencias de servicios que hay en tantas regiones del país.
¿Qué consecuencias trae la no presencialidad especialmente en los niños de la zona rural, que no tienen acceso a conectividad?
La pandemia también mostró que las familias, especialmente de las regiones apartadas, pedían que se les entregaran guías impresas porque no tenían dispositivos o posibilidad de tener conectividad. Deberíamos estar pensando en soluciones acordes con las situaciones y espacios. Muy pocos niños en Colombia reciben materiales impresos y ahí está la primera brecha. Muchos de los esfuerzos que se hicieron por poner muchos de los contenidos en plataformas digitales terminaron siendo inútiles por la imposibilidad de las mismas familias de poder acceder a ellos. Hay que resaltar que funcionaron cosas que no se esperaban como por ejemplo mandar contenido por WhatsApp.
Un tema grave tiene que ver con las edades de los niños, pensar que los más pequeños pueden conectarse y estar atendiendo una actividad virtual es muy difícil o pensar que los cuidadores pueden reemplazar la labor de los centros de desarrollo infantil, también fue un error. Lo que debemos estar haciendo es cerrar brechas, es identificar todas las situaciones que se agravaron para que nuestro compromiso sea cerrarlas en la medida de lo posible.
Todavía hay padres que se oponen a enviar a sus hijos a las aulas, ¿qué recomendaciones les puede entregar?
Siempre hay miedo, pero creo que nos toca a las autoridades y colegios, e incluso los medios de comunicación, crear confianza. Nosotros sacaremos un estudio sobre las afectaciones que hubo durante la pandemia con el ánimo de estar más tranquilos. El semestre pasado en alternancia hablamos con los rectores y les decíamos que era seguro, que abrieran y no ha pasado nada.
¿Cuáles cree que son los retos en materia educativa para tener éxito en la presencialidad?
Lo primero es atender lo emocional y lo social porque todo esto ha sido un proceso difícil para muchos niños y muchas familias. Lo segundo es aprender a identificar las diferencias para que precisamente cuando se empiecen a hacer esos planes de cerrar brechas hayamos identificado en qué estaba cada niña y niño. Lo tercero es buscar esos niños que no han regresado al sistema, la gran preocupación que hay en el mundo entero tiene que ver con la deserción escolar; muy seguramente el sistema educativo ha perdido niñas y niños que se nos han ido para el trabajo o se han quedado en casa.