Hoy Reino Unido se convierte en el primer país del mundo en iniciar un proceso de vacunación masivo contra el Covid-19. El biológico, desarrollado por Pfizer/BioNTech, que requiere un refuerzo a los 21 de su primera aplicación, es la vacuna que se comenzó a aplicar hoy en el país europeo, en una jornada sin precedentes.
Tal y como lo informaron las autoridades británicas, las vacunas comenzaron a llegar a Reino Unido desde la planta de Bélgica, donde fueron fabricadas, días antes de comenzar el programa. Los biológicos fueron trasladados hacia 50 hospitales que han sido seleccionados para comenzar con la vacunación, que arranca de forma simultánea en Escocia, Gales e Irlanda del Norte.
Los hospitales seleccionados cuentan con facilidades para conservar las vacunas a 70º bajo cero.
Una vez que las cajas se dividen y las vacunas se descongelan, pueden conservarse en una nevera a temperaturas de entre 2º y 8º por un máximo de 5 días.
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Stephen Powis, director médico del Servicio Nacional de Salud (NHS) de Inglaterra, informó que hasta el momento se han ordenado 40 millones de dosis; la cantidad requerida para vacunar a 20 millones de personas, de las casi 68 millones que habitan en el país. De momento hay disponibles cerca de 800.000 dosis, pero se espera que antes de que acabe el año lleguen otras cuatro millones. El resto de las personas sería vacunada en el 2021.
En Reino Unido el programa de inmunización estableció parámetros para priorizar a la población que se vacunaría inicialmente. Se trata personas mayores que son pacientes externos de estos hospitales, personas que acaban de ser dadas de alta, residentes y empleados de hogares de ancianos, y personas mayores de 80 años, quienes trabajan atendiendo la pandemia. Según informó BBC, las citas disponibles no utilizadas se emplearán para los trabajadores sanitarios, “que son quienes corren el mayor riesgo de enfermarse gravemente por el virus”.
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La vacuna desarrollada por Pfizer/BioNTech es la primera que se empieza a aplicar y que pertenece al nuevo tipo de vacuna llamada ARN. En ésta el mensaje se codifica en una molécula de ARN que se encapsula en una membrana lipídica para que pueda entrar en las células. El ARN entra en las células y hace que estas fabriquen proteínas de la espícula del coronavirus. La respuesta inmune que se desprende de este procedimiento produce linfocitos de tipo B, que crean anticuerpos que bloquean el virus.
De este modo Reino Unido empieza a ser el blanco de la atención del resto de los países del mundo, los cuales observan con detenimiento la forma cómo se comporta el biológico en la población y los detalles de logística utilizados para partir de un referente y cumplir con sus procesos de inmunización internos.